Cuatro amigas comienzan una
aventura en la que se verán envueltas en un
juego erótico, juego que será la excusa para que el lector vaya
conociendo la historia de estas mujeres aparentemente perfectas, que lo tienen
todo: juventud, belleza, amor, o sexo en
el caso de Alicia, y un empleo que las satisface plenamente y que comparten.
Pero al final descubriremos que esa perfección inalcanzable, y casi envidiable por
otro lado para la mayoría de las mujeres reales, no es tal, que es sólo la máscara que oculta
una realidad más dramática.
El argumento que en principio podría
parecer atractivo, al final resulta ser poco consistente, tópico, banal, superfluo,
carente de interés y de novedad.
La trama es sencilla, sin
complicaciones, toda la historia se desarrolla sin altibajos, aunque sí he
notado un claro cambio de ritmo, al principio la historia fluye lentamente y ya
en el último tercio del libro coge brío y asistimos a un desenlace rápido y
bastante más denso, es ahí donde ocurre lo importante del relato.
Los personajes me han resultado
un poco planos, las cuatro amigas se parecen mucho, tanto que al principio
cuesta diferenciarlas, todas representan un tipo de mujer muy específico, las
“superwoman”, mujeres pijas que visten de marca, que siempre están arregladas y
a la moda, que disfrutan con las
compras, perfectas madres, perfectas amigas y perfectas amantes, tanto que
resultan empalagosas. Menos mal que en el último tramo de la novela se nos
vuelven humanas, reales y con problemas como casi todo el mundo.
Toda la novela me ha parecido un
reflejo de esos insulsos personajes. Bonita en apariencia pero superficial y
vana en el contenido.
Sin embargo sí que he de alabar
la creatividad y la originalidad que derrocha la autora en el aspecto formal de
la novela. Destacaría la belleza del intercalado de la poesía dentro de la
prosa y la prosa ya de por sí poética en muchos pasajes de la obra. En mi
opinión, la autora demuestra ser más poeta que novelista como podemos apreciar
en el empleo del lenguaje plagado de metáforas imaginativas y evocadoras. ¡Lástima
que se le escape algún que otro laísmo de vez en cuando!
Conoci a la autora el otro día, precisamente en un recital de poesía.
ResponderEliminarNo te equivocas es más poeta que novelista, además lee, recita en público desde hace años, y dió una clase sobre ello estupenda.
Te hubiese encantado oirla y verla.
¡Gracias Josefina!
Un abrazo.
Sí, me hubuese gustado. Yo la vi precisamente en la presentación de esta novela en una feria del libro. Una mujer muy simpática. Bss
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